La tierra llora: Amazonía aún arde en llamas

 

Referencial/cubasi.cu

                          

Luego de un mes aproximadamente de haberse iniciado un incendio forestal de grandes proporciones en el denominado "pulmón vegetal más grande del planeta", el cual se compone por más de 7 millones de kilómetros cuadrados de bosques húmedos distribuidos entre Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú, Venezuela, la Guyana francesa y Surinam; el primero de estos países representa la mayor zona selvática y se encuentra envuelta en llamas.

La Amazonía es la mayor región tropical del planeta, cuya superficie posee unos 7,4 millones de km2, así lo indica el portal web https://www.telesurtv.net/news/deforestacion-amazonia-brasil-consecuencias-clima-planeta-20190820-0048.html, el cual reporta: “La Amazonía, cuyo 60 por ciento está en Brasil, absorbe 1.000 millones de toneladas de dióxido de carbono, pero el pulmón del mundo se está quemando desde hace más de 15 días".

Asimismo, detalló que: “La Amazonia tiene 7,4 millones de km2, es la mayor región de bosque tropical del planeta y alrededor del 60 por ciento se encuentra en Brasil. Su bioma es inigualable y su existencia es vital para los esfuerzos contra el cambio climático. Sin embargo, en estos momentos el llamado pulmón del mundo está envuelto en llamas", refiere Telesur.

¿Pero qué originó este fuego?

Aún no se determina con precisión el origen de la llamarada, expertos señalan que este tuvo lugar por acciones humanas:" El director del Programa para Amazonía del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en ingles), Ricardo Mello, aseguro que en la región de la Amazonía no existen procesos naturales que provoquen incendios, por lo tanto, el incremento es por la acción directa del ser humano" declaró para Telesur.

Por otra parte, https://www.amazoniasocioambiental.org/es/radar/el-gran-saqueo-que-amenaza-al-planeta/enfatiza que: "Sin duda, este es el ecosistema más amenazado por la deforestación, producida por la tala de los árboles para el comercio de madera o la implantación de ganadería, por las obras de infraestructura mal planeadas y por la corrupción y el incumplimiento de las leyes de protección, entre otras razones.

 

Referencial/El país.cr

La Amazonía está siendo corroída por la minería ilegal, que deteriora y contamina los ríos con mercurio, cianuro y otras sustancias, lo que va acabando con peces, anfibios, reptiles, mamíferos y aves, además de afectar comunidades del ámbito regional que dependen de ellos para sobrevivir", explica amazoniasocioambiental.org en un artículo publicado en febrero de 2019 en atención a los llamados que han realizado los indígenas de la región, organizaciones y movimientos sociales ambientalistas en relación a este flagelo.

¿Qué hacen las autoridades al respecto? Son muchos los gritos y pocos los salvavidas

 Ante esta inminente amenaza ambiental el presidente de Brasil Jair Bollonado, no ha mostrado mucho interés, probablemente porque con su llegada al poder se ha incrementado la exploración de minerales en esta zona "desde la llegada de Jair Bolsonaro al Gobierno de Brasil se estima que la deforestación se ha triplicado, pues solo en julio se talaron 2.254,8 kilómetros cuadrados de bosques, es decir, 278 por ciento más que en julio del año pasado, según las cifras del Inpe en junio pasado", reporta Telesur.

 Sin embargo, Bolsonaro desestimó las cifras del Instituto Nacional Investigación Espacial de Brasil (Inpe), el cual a su juicio representa una campaña para "perjudicar a su gestión": "El mandatario brasileño catálogo los datos del Inpe como falsos, cuya publicación se hizo para perjudicar a su Gobierno. Y es que Bolsonaro ha emprendido una política de explotación de tierras para hacer de la Amazonía una zona económica con <un desarrollo similar al de Japón>. Por ello, ha criticado que "el 60 por ciento del territorio está inmovilizado con reservas indígenas y otras cuestiones ambientales", publicó Telesur.

Ante la falta de respuestas con contundentes, un grupo de ambientalistas se apersonaron el pasado miércoles 21 de agosto en la ciudad de Bahía en el Salvador para exigir un mayor compromiso en materia ambiental durante la antesala de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el cambio climático (COP-25), donde el ministro del Medio Ambiente de Brasil Ricardo Salles "fue abucheado durante su participación en la Semana del Clima de América Latina y el Caribe", indica Telesur.

La autoridad ministerial fue recibida "al grito de la "Amazonía se quema" y fuertes protestas acompañadas de carteles que decían frases como "Amazonía en llamas", "Contra el desmonte ambiental", informó Telesur.

 

Referencial/cubasi.cu

Ante este llamado a la conciencia, Salles afirmó que el "gobierno de Brasil está comprometido con el medio ambiente" lo que causó molestia a quienes defienden la protección del ambiente. El ministro aseguró que "es una situación muy preocupante, agravada por el tiempo seco y el calor"; "Vamos a actuar para apoyar a los gobiernos de los estados en ese combate de los incendios forestales”, subrayó Salles.

¿Porque la contingencia para apagar las llamas es tan paupérrima? ¿Acaso el presidente Donald Trump no posee suficientes recursos para atender esta energía ambiental? ¿Costará más que extinguir el fuego que comprar Groenlandia?

Un llamado a la conciencia

https://www.amazoniasocioambientalorg/es/radar/el-gran-saqueo-que-amenaza-al-planeta/ Advierte que: "Si prosigue el saqueo y destrucción de la Amazonia, el equilibrio de la región se modifica irreversiblemente y se perderán servicios ambientales como el mantenimiento del régimen de lluvias del que dependen la agricultura, las actividades pecuarias y la cadena alimenticia regional.

<El bosque amazónico cumple un papel vital en la regulación climática del planeta y el ciclo de evapotranspiración y precipitación, al hacer las veces de enfriador. Si esta función es alterada, los impactos por calentamiento global se exacerbaron y los eventos climáticos extremos irán en aumento>, le precisa a EL TIEMPO una voz de la Fundación para la Conservación y Desarrollo Sostenible (FCDS).

Los eventos climáticos extremos se refieren a inundaciones y sequías más frecuentes, a huracanes y tormentas más fuertes, a la escasez de agua dulce, al aumento de enfermedades, como la malaria, y el nivel de los mares en, al menos, 18 a 59 centímetros, entre otras consecuencias", documenta amazoniasocioambiental.

 

Referencial/La nación.com

Pongamos a pensar por un instante qué sería de nuestras vidas sin poder respirar ¿Pudiésemos acaso hacerlo sin pulmones? no lo creo, y ¿usted? ¿Queremos tener más riquezas materiales a costa de nuestras riquezas naturales? Estamos en el deber de exigir a los gobiernos del mundo mejores políticas ambientales que no atenten agresivamente contra el ecosistema, proyectos que realmente garanticen el crecimiento político, social, cultural, ambiental y económico de los pueblos, pero sin menoscabar los recursos naturales y minerales del planeta para beneficio de una minoría (elites).

Ojalá se activaran mecanismos de cooperación para atender esta emergencia ambiental, así como lo hace la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) para temas "temas de seguridad".

Es preponderante garantizar el menor impacto ambiental pues es precisamente la naturaleza la que nos provee de todo. Como diría Silvio Rodríguez" Seamos un tilín mejores y mucho menos egoístas".

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